Llevar una vida sana, equilibrada y en balance no debiera ser una tarea complicada. Nuestra salud debe ser nuestra prioridad, ya que sin ella no podemos desarrollarnos de manera adecuada en las otras áreas de nuestra vida, considero importante darle a nuestra salud el lugar que merece. La salud no se siente, lo que se siente es la enfermedad; no esperemos hasta encontrarnos con algún padecimiento para cuidar nuestra salud.
“Dietas”, una palabra que personalmente no me gusta, pienso que inmediatamente programa a nuestro cerebro a que pasaremos hambre o tendremos que hacer algo especial, o sufrir el proceso y, además, nos programa a que será algo que durará un periodo determinado de tiempo, muchas veces muy corto, y que al final no genera ningún cambio representativo. Me parece que es más conveniente modificar ese término y mejor pensar en una alimentación balanceada, saludable, sostenible y disfrutable o, dicho de otra forma, un cambio de hábitos. Voy a tocar cada uno de estos términos para comprenderlos mejor.
Balanceada. Una alimentación balanceada es aquella que tiene variedad y en las cantidades adecuadas para la persona en específico. No es lo mismo los requerimientos de un hombre a los de una mujer, ni los de un adolescente o los de un adulto, tampoco es lo mismo los requerimientos de personas con ciertos trabajos más físicos a aquellos con trabajos más sedentarios. Cuando se hacen dietas normalmente hay alimentos prohibidos y en algunas ocasiones restricciones muy estrictas, cosa que muchas veces hace que se nos antojen más esos alimentos prohibidos, o que tengamos problemas como estreñimiento, dolores de cabeza o cambios de humor, y esto en lugar de ser algo positivo nos perjudica y es una de las razones por las cuales muchas personas dejan las dietas. Se puede disfrutar de todo con balance.
Saludable. Una alimentación saludable es aquella que tiene principalmente alimentos libres de químicos, lo más naturales posibles. Entiendo que esto hoy en día no es cosa sencilla; pero aun dentro de la gran gama de posibilidades que tenemos para elegir, hay varias buenas opciones. Mi recomendación es revisar los ingredientes en la etiqueta, elige alimentos que tengan menos de 5 ingredientes y que estos los puedas pronunciar sin dificultad. Elige lo más natural posible en tu alimentación habitual, y de vez en cuando puedes disfrutar de algunas otras cosas que sean de tu agrado y que tal vez no son tan sanas.
Sostenible. Se refiere a que es apta para ti desde varios enfoques. Una parte es el tema económico; que sea una alimentación que esté dentro de tus posibilidades económicas. Otro punto importante es que la alimentación vaya con tu estilo de vida, que puedas preparar los alimentos y que puedas transportarlos en caso de ser necesario. La idea es facilitarnos la vida, no complicarla más con una alimentación cara, muy específica o difícil de preparar. Elige lo que te acomode que sea saludable y que lo puedas balancear.
Disfrutable. Esta parte me parece vital, es muy importante que disfrutemos la comida, hay muchas maneras distintas de preparar alimentos, de acuerdo con nuestros gustos, que resulten atractivos para nuestro paladar; solamente es cuestión de ser un poco creativos.
La idea general es mejorar nuestros hábitos y que nos acostumbremos a comer de una manera adecuada para nuestro cuerpo, con esto podremos llevar una vida saludable siempre y sin necesidad de hacer dietas restrictivas.
