Podemos empezar por decir que el 4 de julio tiene muchos significados en temas de celebración, efemérides o cualquier otro evento en lo particular, pero hoy tengo que destacar uno, y es el día del eBook, libro electrónico o digital, como algunos le llaman. Precisamente quiero detenerme en este punto y contarles que  a finales de 1971 inició este formato, y mundialmente en ese año fue cuando Michael Hart arrancó con su proyecto Gutemberg, dando rienda suelta a sus ideas; él deseaba crear una biblioteca digital gratuita con obras de distintos autores, entre ellos Dante o Shakespeare, lo que dejó un legado que perdurará por muchos años.

Ahora quiero que nos enfoquemos en cómo ha sido el auge del libro electrónico; en estos últimos años, se ha incrementado la lectura y la escritura por temas de pandemia y una serie de acontecimientos que han ocurrido, de donde podemos sacar un aprendizaje, la mayoría de las personas en el mundo se dedicó a escribir un libro, y se atrevió a publicarlo pese a que la inestabilidad en cuanto a salarios y otros factores estaban fuera de control y hacían presagiar un escenario austero.

En mi experiencia como escritora, pude dedicar mi tiempo en pandemia a escribir libros y poder liberarme, dejando todo lo que me traía como madeja de lana en la cabeza, plasmar en el celular y luego apoyarme de personas profesionales @comunicaciongd.com, quienes me apoyaron en ese proceso para así, ya hace dos años, publicar mi primer libro en formato digital en e-Book Kindle de Amazon: un sueño cumplido que no fue fácil porque significó un largo camino lleno de tropiezos y miedos que emergieron en todo ese hermoso libro que hoy a muchos ha cautivado, y de cierta manera hay historias de mujeres que también se plasman en esas líneas que hoy perdurarán en el tiempo.

Un pedacito de cada historia logrará cambiar muchas vidas, incluida la mía, porque aunque no lo crean, escribir un libro es sanador y te libera de muchas cosas; hablando de esto, digamos que existen algunas ventajas o beneficios a la hora de adquirir un libro digital o electrónico.

• Se mantienen en el tiempo y sin deteriorarse.

• Podemos marcarlo donde más nos guste y no se dañará.

• Pueden ser entregados en un clic en cualquier rincón del mundo.

• Su producción es respetuosa con el medio ambiente.

• No ocupan espacio físico  y podemos llevar la cantidad que deseemos a cualquier parte donde vayamos.

• Podemos apoyar a una institución que lo necesite destinando un porcentaje de las ventas. Y así podemos enumerar muchos beneficios más, sin desmerecer el libro físico, que en lo personal me cautiva y creo que a muchos, pero hoy toca celebrar a su hermano menor, que es el eBook electrónico. Muchas felicidades, disfruten, y como dice mi amiga Aziyadé Uriarte: ¡Felices libros!