Por la noche, cuando Jonás apenas cerraba los ojos, la flor se abrió, extendiendo hermosos pétalos dorados, luminosos, como hojas delicadas de oro. Y al centro de la flor, sobre hojuelas de polen de oro, había un hermoso niño hada. El jardinero tomó en brazos a tan hermoso niño, al que puso por nombre Plim…